En dos meses el gobierno de Rajoy
ha pasado de las musas a la calle. Del papel a la realidad de los telediarios,
el gobierno mejor, más preparado de la historia de la humanidad en apenas
sesenta días se ha colmado de mugre. Y de sangre.
El guión se desarrolla según lo
propuesto por el gallego amigo de Correa y de Gürtel, ese que si se le hubiese
procesado, sin duda, le hubiese caído algo más que buenas sensaciones. Cuando
Rajoy no obró, cuando le contaron con pelos y señales, el siguiente pelotazo de
la red Gürtel en Arganda, dos mil millones de pesetas para repartir, zanjó su
obituario, se le recordará, cuando sus voceros callen, como un cobarde inactivo
que prefirió no hacer nada ante la corrupción y ponerse de lado para que no le
tocase demasiado, eso sí, aceptando los regalos de todo incluido en viajes para
la familia.
Ese guión para esta pobre España
es letal para todos aquellos que aún creemos en la libertad: primero y ante el
canguelo que corre por la piel de toro, despido gratis y a cascoporro, nada de
antigüedad, ni de gaitas, todos como la Lewinsky, becarios de por vida para
satisfacer los más bajos instintos de la mayoría de empresarios de este país,
que son todos cercanos a Ruiz Mateos y Gerardo Díaz Ferrán, esos grandes
prohombres escasamente ensalzados.
Por supuesto, el crédito sigue sin
fluir, la confianza debe estar congelada con Walt Disney, y por último para que
el plan cuadre, el plan típico de la extrema derecha, del fascismo elemental de
los nuevos liberales es dar pantumaca en la calle, leña al mono, castañas pilongueras,
unas buenas hostias a unos niñatos de mierda y ya está, sociedad cauterizada,
firme, expedita para lo que queramos: en definitiva, fuera derechos de todos
estos vagos y gandúles, las mujeres otra vez a pasar por el aro machista que
las devora desde hace más de 10.000 años, preparados para bajaros el dinerete
que gastabais alegremente y finalmente nos quitan la sangre de nuestros hijos,
sangre que les pertenece al gobierno, a los vampiros del PP Gürtel que no
tienen suficiente con todo lo que tienen, necesitan la total y absoluta
sumisión, si nos quitan la calefacción en invierno, los profesores mínimos, las
becas, y nos cierran los centros, lo mínimo que le debemos a este gobierno que
se preocupa por nosotros es quedarnos en casa y rezar por ellos para que les
entren nuevas ideas para demoler al personal.
Gallardios
El que ha sido ya nominado por
algunos como el peor gestor democrático de la historia y por otros como el
menos democrático gestor de la democracia, se lía con la ética para decirnos
que dar una mano de hostias, unos porrazos, unas conmociones, unas carreritas,
a los menores de edad, no se diferencia, legalmente de hacerlo con un mayor de
edad. Si el que rompe la ley, es o no mayor de edad, a este malgastador, a este
mentiroso, a este pepero gurteliano de pro, le da un bledo, le importa un
ardite, para el la ley es la ley y le da lo mismo quien la quebrante, eso sí
para este miope demócrata, no se le pasa por la cabeza que la ley sea
quebrantada por un policía, eso lo dice todo del bicho, por favor que la gente
vea a este individuo como lo que es, un peligro potencial para el estado de
derecho y para los bolsillos de los españoles, recordad 10.000 millones de deuda
de despilfarro, de mentira en Madrid. Para acabar de ministro.
Vuelven Bárcenas y P.A.C.
La policía que tanto defiende
Gallardios y el ministro del interior, sectario opusino, ya no son tan de fiar
cuando realiza informes fundamentados, basados en la realidad para declarar que
LB es Luis Bárcenas amigo íntimo de Rajoy, manejador de dineros públicos muchos
años y sostenedor de Gürtel desde el interior de la cueva de Alí Babá, o para
decir que PAC es fácil que fuera o fuese Paco Álvarez Cascos. Claro, estos policías
no son del agrado de Génova, ni del agrado de nuestro líder, que de visita en
Reino Unido, lo único que le importa del derramamiento de sangre de nuestros
hijos es que no se de una imagen fiel de España… Si, puntos suspensivos para no decir algo de
lo cual me arrepienta.
Todo esto que hemos narrado
sucintamente y por encima, en dos meses, que nadie espere de nuestro presidente
nada más cercano, él está aquí para agradar a los empresarios, a Merkel y a los
mercados. Seguro que no pararán hasta donde quieren, cuando lleguen ya les
avisaré, mientras tanto, tengan cuidado con nuestros hijos e hijas, cuando un
policía les encime (como dicen los futboleros) porra en ristre por estar hablando
con un amigo y les suelten un mamporro del doce, les rompan las gafas, las
narices y algún que otro diente, ya saben, que callen, miren para abajo y
piensen como diría Gallardios: “hoy no he hecho nada, esto por el día que lo he
hecho y no me han pillado, la verdad es que he sido un violento al atacar la
porra del señor guardia con mi nariz”.
Y esto es la historia de nuestra
nación.