tonto, ta.
(De or. expr.).
Solo existe
en este valle de lágrimas algo peor que un tonto, un tonto gracioso, porque se
cree el bobo o tonto o melifluo, que con una gracieta, una supuesta ironía puede
esconder su idiocia, su estulticia y nada más lejos de la realidad. El tonto sólo
dice tonterías y sus gracias no son tales, son dichos de tontos, esto es,
tonterías. Muchos tipos de tontos plagan actualmente la política, tanto en vertiente
patria como en vertiente internacional, tontos monotemas, tontos y tontas
solemnes que les gusta retorcer el idioma, tontas multimillonarias, tontos
colegiados. En fin, tontos que al socaire de la crisis se han implantado como
garrapatas en nuestras vidas, haciendo de todos nosotros unos tontos
consentidores.
¿Tonto del puro?
Cuando uno
cree que no puede superarse, surge de sus cenizas, se viene arriba y se supera
asimismo. Alejado del remolino nacional y de los banales acontecimientos que
aquí ocurren: muertos por riadas, manifestaciones multitudinarias,
independentismos, etc. El personaje se fuga a USA para supuestamente hablar en
un plenario sobre algo, lo absurdo es que el plenario estaba completamente
vacío, aguantaban Angola, Zaire y Tuvalu como sordos oyentes y eso que estaban
preparando sus respectivas intervenciones. En España poco menos que lo
encumbran a la altura del nuevo Emperador del sacro imperio.
Luego, uno ya
no tiene poder de respuesta ante la estulticia del paisano y de su séquito, vuelve
a batir un nuevo record interestelar de majadería y aparece como si fuera una
escena de Desayuno con Diamantes, pero en vez de con la grácil figura de Audrey Hepburn engalanada de piedras preciosas, aparece un zafio con un
habano de cien euros, rodeado de una partida de bufones propios de otros
tiempos (¿no tiene un buen amigo que le diga el ridículo que está haciendo?),
imagino que en ese paseo ideó esa frase para la posteridad sobre los presentes
y ausentes en manifestaciones, seguro que entreveía en lontananza un Premio
Nobel a la frase mas ocurrente del año…
El tonto vuelve al hogar
Para terminar, vuelve al hogar a trabajar y esas cosas
que no le gustan, que sabemos positivamente que no le gustan: dar la cara,
responder preguntas, decidir, gobernar…. Ante preguntas lógicas contesta con su
habitual falacia, ahora que sabemos que es un mentiroso contumaz, que lo hace
con nocturnidad alevosía y premeditación, todas las preguntas llevan una carga de
escepticismo ganado a pulso. Sus respuestas son un compendio entre lo soez, la
mentira, la vulgaridad, la tontuna y la falta de respeto a un pueblo, el español
que por su culpa estamos al borde del abismo. Como documento inestimable paso a
reproducir la respuesta del ser mas impúdico que ha pasado por nuestra política:
"Sobre las filtraciones, como ustedes saben
muchísimo mejor que yo, jamás he hecho una filtración en mi vida. Además, no pienso hacerla, eso me convierte en un ser tan
popular ante... en fin, algunos de los periodistas que no están aquí en estos
momentos. A partir de ahí, pues claro, tampoco puedo estar contestando a
filtraciones todos días porque incluso hay días en que las filtraciones son
contradictorias, ¿no?. Aquí ha salido la del fin de semana, ¡pues muy bien! Si
hay una agencia o alguien que dice que este fin de semana vamos a pedir el
rescate como dicen ellos, caben dos posibilidades: que esa agencia tenga razón
y mejor información que yo, lo cual es muy posible, o que no sea así, lo cual
pues a lo mejor también es posible o no, ¡qué más da! Pero si a usted le sirve
de algo lo que yo pueda decirle y si le parece que lo que yo pueda decirle es
más importante que esa filtración, le diré que no. Pero vamos, aún así puede
usted pensar lo que estime oportuno y conveniente, porque además ¡a lo mejor
acierta! O sea que... Bien, a partir de ahí, ¿qué más había?"
Pd: Sólo para recapacitar, la Presidenta del Fondo
Monetario Internacional dice sentirse muy “mal por la gente”, ella que nunca ha
estado en una cola del paro, que no ha sentido la ráfaga fría y desoladora del
hambre, que no sabrá sin duda, lo que es que su hijo no pueda comer pescado una
sola vez al mes, ella lo pasa muy, muy mal, pero está encantada con las medidas
que nos empobrecen y nos denigran. Pobre presidenta, enviémosla presentes y
regalos para que suba el ánimo.
Por otro lado, los técnicos de hacienda alertan de que “las injustas subidas de
impuestos excluyen a los ricos”. Ya, vamos, que pagamos la crisis los de
siempre los tontos pobres, los nuevos siervos de la gleba.
Pensad y
moved.
Magnífica definición de éste personaje que nos gobierna,y que tanto él,como sus adláteres,deberían dimitir en bloque,por su ineptitud y deslegitimación para gobernar España.
ResponderEliminar